En 1898, mientras el jefe político Martin Lomasney aseguraba una polémica victoria en el octavo distrito de Boston, el Locke-Ober Café presentaba un trago a la altura de la intriga de la época: el Ward Eight. Este cóctel rojo rubí se convirtió en sinónimo del poder político crudo.
El Ward Eight es una variación del Whiskey Sour que entrelaza la historia política de Boston con sabores audaces. Nombrado por el octavo distrito electoral—feudo demócrata donde Martin Lomasney gobernó décadas—combina Whisky de Centeno, Jugo de Limón Fresco, Jugo de Naranja Fresco y Granadina en una mezcla tan compleja como los tratos secretos que la inspiraron.
Visualmente impactante por su tono rojo rubí (gracias a la granadina de granada), se sirve tradicionalmente en una Copa de Cóctel decorada con Cerezas Marrasquino. Su perfil de sabor oscila entre la acidez del limón, la dulzura cítrica de la naranja, el calor picante del centeno y la profundidad frutal de la granadina. Con 20-25% de alcohol, es más fuerte que un Cosmopolitan pero más suave que un bourbon puro.
Su preparación requiere habilidad moderada: equilibrar jugos cítricos con la dulzura de la granadina sin opacar el centeno. Originalmente usaba granadina casera, aunque versiones modernas emplean jarabes artesanales. Servido straight-up sin hielo, es ideal para noches electorales, eventos históricos temáticos o reuniones otoñales con carnes asadas.
Ausente de la lista oficial de la IBA, sigue siendo el embajador coctelero indiscutido de Boston. Su legado incluye una aparición en el cine de 1949 donde un personaje lo pide diciendo: ‘Tres dedos de bourbon y un chaser de cerveza.’
Nacido durante la era de maquinarias políticas en Boston, la historia del Ward Eight refleja los excesos de la Edad Dorada estadounidense. El octavo distrito (actual West End) era el dominio de Lomasney, donde votantes recibían ‘ayuda’ para marcar boletas. El cóctel apareció impreso tras la Prohibición pero decayó hasta que bartenders del siglo XXI lo rescataron.
Versiones modernas a veces usan bourbon o añaden twists de naranja sanguina, aunque puristas insisten en la fórmula original. El cierre en 2012 del Locke-Ober Café convirtió sus menús vintage en objetos de colección, cementando el estatus legendario del trago.
Para mezclar un Ward Eight digno de Beacon Hill:
- Usa whiskey de centeno bonded para autenticidad histórica
- Hierve jugo de granada con azúcar para granadina casera
- Agita los jugos por separado para mejor integración
- Sirve en copas frías para mantener la claridad
- Acompaña con queso cheddar ahumado o almendras
- Bourbon Ward (reemplaza centeno por bourbon)
- Ward de Naranja Sanguina (usa jugo de naranja roja)
- Ward de la Templanza (versión no alcohólica)
- Ward Ahumado (añade jarabe de nuez pecana ahumada)
El Ward Eight no es solo un cóctel—es una lección de historia líquida. Perfecto para brindar por victorias, sean justas o ‘estratégicamente adquiridas.’
Deja un comentario
Todos los comentarios son moderados antes de aparecer en la pagina web y serán revisados dentro de las 24 horas siguientes.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
Comentarios actuales: 2