Como muchas joyas de principios del siglo XX, el Aviation surgió de la búsqueda de algo nuevo y elegante para los clientes deseosos de sabores brillantes pero sofisticados. Hugo R. Ensslin, un barman de origen alemán que trabajaba en el Hotel Wallick de Nueva York, dejó constancia escrita de la receta en su libro de 1916, asegurándole un lugar en la historia. Este cóctel novedoso combinaba Ginebra, Zumo de Limón, Licor Maraschino y un escurridizo ingrediente, la Crème de Violette, que añadía una sutil nota floral y ese suave tinte lavanda.
A finales de la década de 1910, los bartenders interesados en bebidas innovadoras empezaron a experimentar con la receta. Sin embargo, la inminente Ley Seca en Estados Unidos oscureció el panorama, y los licores se volvieron difíciles de conseguir. A pesar de que la Ginebra se fabricaba de manera clandestina, los licores raros como la Crème de Violette prácticamente desaparecieron del mercado.
La publicación de The Savoy Cocktail Book en 1930, a cargo de Harry Craddock, presentó una versión del Aviation sin Crème de Violette, quizás por escasez o preferencia personal, dando pie a una generación de bartenders que conocían el cóctel solo con un tono pálido de Limón.
No fue hasta finales del siglo XX que entusiastas de la coctelería, impulsados por un renovado interés en recetas históricas, volvieron a poner el foco en el ingrediente "perdido". Cuando la Crème de Violette reapareció en el mercado a principios de los años 2000, la versión original del Aviation recuperó el brillo merecido, encantando a los paladares modernos con su olvidado resplandor floral. Hoy, se ensalza como un clásico querido, testimonio de cómo los sabores y colores singulares pueden afianzar la posición de un cóctel en la historia.
Deja un comentario
Todos los comentarios son moderados antes de aparecer en la pagina web y serán revisados dentro de las 24 horas siguientes.
Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *
Comentarios actuales: 4