La aparición del Espresso Martini coincidió con un creciente entusiasmo por el café de especialidad en el Reino Unido. En el Fred’s Club de Londres, Dick Bradsell mezcló Vodka, licor de café y espresso caliente para satisfacer la petición de un cliente que quería una bebida que lo “despertara.”
Su popularidad aumentó a finales de los años 80 y a lo largo de los 90, impulsada por la expansión de la cultura de las cafeterías y la adopción de cócteles más sofisticados. Aunque la receta fue evolucionando, la esencia siguió siendo una versión espirituosa del espresso servida en copa Martini. Hoy día, este clásico moderno continúa siendo un símbolo de la innovación en la barra, uniendo a los apasionados del café con los aficionados a la coctelería.
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